Clarita Rossell, lideresa del Territorio Indígena Multiétnico TIM, se prepara para encuestar a dirigentes de Santa Ana de Moseruna, en la Amazonía sur, sobre el ejercicio de los derechos humanos y los derechos colectivos en esa comunidad. Así como ella, veinticinco mujeres promotoras en derechos indígenas están listas para levantar esa información en distintas comunidades.
La información se levantará en los próximos días en comunidades del Territorio Indígena Multiétnico (TIM) y el Territorio Indígena Mojeño Ignaciano (TIMI) en el marco del Observatorio de Derechos de los Pueblos Indígenas (ODPIB).
“Vamos a conocer qué tanto saben las autoridades de nuestra comunidad sobre los derechos que tenemos como comunidad, cómo es el vivir de cada comunidad, a qué se dedican, sobre medicina tradicional, gobernanza, si los derechos son respetados por el gobierno o no”, dice Rossel.
Todas fueron capacitadas en aspectos conceptuales y en el uso de la aplicación tecnológica para levantar la información. El martes 7 de mayo recibieron sus materiales para comenzar su tarea que se extenderá por tres o cuatro días.
Las mujeres tienen la tarea de entrevistar al corregidor, a la presidenta de la organización de mujeres y a una tercera person que puede ser otro representante e incluso personal de salud.
“Santa Ana de Moseruna es multiétnica, en ella habitamos tres etnias: Chimán, Movima y Mojeña Ignaciana. Gracias a las gestiones que hacen las autoridades, tenemos los tres niveles de educación, kinder (inicial), primaria y secundaria, y tenemos una posta de salud aunque no está equipada”, describe Rossell.
Gaby Justiniano es de la comunidad Mercedes del Apere y es la secretaria de organización de la Subcentral de Mujeres del TIM. “Me ha tocado ir a la comunidad Monte Grande del Apere, vamos a encuestar a las autoridades, al corregidor, a la presidenta de la organización de mujeres y a un líder varón”, dice.
“La encuesta es para ver qué tanto conocen de su misma comunidad, del territorio y como se están ejerciendo los derechos en esa comunidad”, explica Justiniano, y asegura que el entrenamiento le permitió manejar con confianza la aplicación para encuestar.
Los resultados se procesará en el Observatorio de Derechos de Pueblos Indígenas de Bolivia (ODPIB), una herramienta del CEJIS para recopilar información especializada en derechos de los pueblos indígenas y acompañar casos emblemáticos por la violación de los derechos colectivos. En 2021, una encuesta recogió percepciones de las mujeres indígenas del norte de la Amazonía sobre la situación de sus derechos, esta información fue la base para la posterior construcción de la agenda para la gestión estratégica de la Organización de Mujeres Indígenas del Norte Amazónico de Bolivia (OMINAB).
Rosalía Jau Guataica es otra promotora que vive en San Ignacio de Mojos, y le ha tocado trabajar en otra comunidad con la encuesta. Ella comenta: “No conozco Santa Clara, es la primera vez que voy a ir. Aparte, es una forma de conocer nuestro territorio. Sé que es una comunidad pequeña, con unas treinta familias, está un poco alejada, es inaccesible en estos momentos”.
En cambio, Belsa Muiba Guarayuco no tendrá que salir de su comunidad San José del Cabito para aplicar las encuestas porque lo hará allí mismo. «Lo que queremos saber es cómo se vivía antes, qué producían, cómo era el clima, y si ahora es lo mismo o no, o ha habido cambios. Es la primera vez que veo que se va a hacer en las comunidades, es la primera vez que como comunidades estamos participando”, dice.
Ante el interés de censar a su población, las centrales y organizaciones indígenas de tierras bajas se han visto en la necesidad de garantizar con agentes censales, transporte y alimentación la realización del Censo de Población y Vivienda en respuesta a las carencias de logística del Instituto Nacional de Estadística (INE).(más…)
El Territorio Indígena Mojeño Ignaciano tiene una extensión de 54.904 hectáreas, así que los empadronadores capacitados por el Instituto Nacional de Estadística se encargarán de levantar la información para el Censo de Población y Vivienda los días 23, 24 y 25 de marzo. Las autoridades del TIMI se comprometieron a garantizar la realización de este conteo que se realizará con 12 años de diferencia respecto del anterior.(más…)
Los sistemas agroforestales sucesionales (SAFS) empiezan a dar frutos en el Territorio Mojeño Ignaciano (TIMI) a pesar de los eventos en contra como los incendios, las plagas y la sequía. Los resultados del acompañamiento a 14 SAFS, para dar asistencia técnica a los productores, muestran que tanto el bosque como las familias mojeño-ignacianas se reponen contra la adversidad y comienzan a recoger los frutos de aplicar esta metodología en sus cultivos. (más…)
Hace más de cuatro años, el pueblo movima identificó islas de cacao silvestre en su territorio y las incorporó en su Plan de Vida. Una de ellas es la isla Porvenir, ubicada en el río Mamoré, dentro del Territorio Indígena Movima, donde existen por lo menos 60 hectáreas de árboles de cacao que ninguna mano humana ha plantado.
Así empezó el proceso de aprovechamiento del cacao de este lugar. La isla, su fauna y su flora fueron objeto de estudio y análisis, para luego ser un área de conservación para esperar anualmente la producción de cacao silvestre. Todo este proceso fue liderado por la Subcentral de Pueblos Indígenas Movima (SPIM) y la Subcentral de Mujeres Indígenas Movima (SMIM), organizaciones que cobijaron la creación de la Organización de Productores y Recolectores de Cacao Movima (ORPCM), con la asesoría y el acompañamiento del Centro de Estudios Jurídicos e Investigación Social (CEJIS).
Margoth Céspedes, responsable de la Oficina Regional de Trinidad del CEJIS, explica que a partir de la isla de cacao silvestre se fortaleció una dinámica de control y vigilancia del territorio para evitar actividades ilegales de cazadores, pescadores y madereros eventuales que entran sin permiso de los comunarios y de las autoridades a hacerse de los recursos naturales.
Hasta ahora las familias movimas se organizaron para aprovechar el cacao silvestre en todas sus fases, que implica la cosecha, el beneficiado, la transformación en chocolate y la comercialización.
Es una iniciativa que busca la soberanía territorial, y que se percibe desde la señalética en la zona: Prohibido Cazar. “Se ha sentado soberanía. No se están entrando (cazadores o madereros ilegales), aunque a veces hay resistencias; hay terceros que depredan animales, talan árboles. Eso se ha podido frenar, no en su totalidad, pero se ha protegido a la naturaleza”, dice María Luisa Vaca, presidenta de la SMIM.
Para la profesora Vaca, lo que hace falta es socializar más el proyecto entre las comunidades, una tarea compleja por la característica dispersa de las comunidades y de la falta de recursos para que las autoridades del territorio puedan difundir los resultados del aprovechamiento del cacao silvestre y de otras potencialidades existentes en el territorio.
La expansión
Ahora se planea ampliar la producción de cacao, bajo la marca de cacao silvestre, mediante el cultivo de esta especie dentro de los sistemas agroforestales sucesionales (SAFS) que producen una diversidad de alimentos, sin el uso del fuego e imitando al bosque en parcelas que a la vez combinan vegetación alta y baja.
Para ello, se cuenta con un vivero en Santa Ana de Yacuma, donde ya existen plantines de cacao que van a proveer y diversificar aún más los SAFS que funcionan en el territorio Movima.
Céspedes explica que las familias involucradas tanto en la producción del cacao silvestre como en los SAFS “tienen la voluntad y firmeza” para continuar con la experiencia agrícola.
La producción de cacao constituye una alternativa económica productiva para las familias Movimas. Por ello, se apuesta por una producción diversificada que les permita producir cacao en los SAFS, junto a otros productos como maíz, yuca, plátano y críticos. Se trata de todo un reto puesto que deberán esperar entre tres y cuatro años para tener los primeros frutos del preciado cacao. La expectativa de la gente es seguir sosteniendo los recursos del bosque en el marco de la Gestión Integral de los Territorios Indígenas, con apoyo del CEJIS, ahora que se han incorporado al trabajo sistemático y metódico que exige el beneficiado del cacao.
Ante un evidente problema de salud en las comunidades indígenas por la contaminación de la minería del oro en los ríos amazónicos, el Centro de Estudios Jurídicos e Investigación Social (CEJIS) y el Centro de Documentación e Información Bolivia (CEDIB) convocaron a un taller para analizar los “Impactos del mercurio en la salud” ante un auditorio formado por representantes indígenas y de distintos niveles de gobierno, además de funcionarios de salud. (más…)
En el país se han registrado más de 256 mil focos de calor en el año. De ese total, el 10% (25.291 focos) ha afectado la superficie de territorios indígenas titulados en la región de Oriente, Chaco y Amazonía, según el Centro de Planificación Territorial Autonómica del CEJIS. En los últimos años, como efecto de las políticas estatales para ampliar la frontera agrícola, las comunidades indígenas se han visto seriamente amenazadas por incendios y falta de agua, por eso aplican controles internos de quemas y demandan atención al gobierno nacional ante la sequía. (más…)
Un total de 93 jóvenes indígenas de comunidades de la Amazonía norte y sur, la Chiquitanía y el Chaco de Bolivia unieron sus voces en un manifiesto que demanda inclusión, la gestión sostenible de sus territorios y los espacios de capacitación sobre derechos colectivos indígenas. La propuesta de 12 puntos es el resultado de dos jornadas en las que evaluaron los impactos del cambio climático, las amenazas y presiones en sus territorios y las respuestas que podrían paliar esas adversidades.(más…)
Jóvenes indígenas de tierras bajas se reunirán este 10 y 11 de octubre para pensar y evaluar su rol frente a las presiones políticas, económicas y ambientales que viven sus territorios en la Amazonía norte y sur, la Chiquitanía y el Chaco. El encuentro denominado “Territorios, gobernanza y transformaciones” está impulsado por el Centro de Estudios Jurídicos e Investigación Social (CEJIS) en el marco de la Alianza por los derechos ambientales y territoriales.(más…)
La sequía que antes era cíclica ahora es permanente en los territorios de Lomerío y Monte Verde, en la Chiquitanía boliviana. Por tanto, el derecho de acceso al agua está restringido para su población, según verificó la encuesta del Navegador Indígena aplicada este año en varias comunidades de la región.(más…)