MARÍA GALINDO: “NO HAY NINGÚN AVANCE EN MATERIA DE DESPATRIARCALIZACIÓN”
25/06/2013 (ODPIB).- La descolonización es “…Un proceso político, ideológico y sociológico cuyo propósito es dar fin a una situación colonial de un territorio habitado por pueblos y naciones sometidas a una serie de sumisiones y explotaciones.”, según afirma Roberto Choque[1] en su ensayo “Proceso de descolonización” publicado en el libro “Descolonización en Bolivia, cuatro ejes para comprender el cambio”[2]. No obstante, el actual Gobierno de Bolivia, ha recibido duras críticas por su falta de consecuencia en las políticas aplicadas y por los mínimos avances en materia de despatriarcalización específicamente.
En ese sentido, María Galindo, psicóloga de profesión, locutora en la Radio “Deseo” de La Paz, fundadora y actual integrante del colectivo feminista Mujeres Creando, autora del libro “No se puede descolonizar sin despatriarcalizar”, entre muchos otros, en su visita a nuestras oficinas en Santa Cruz de la Sierra, analiza cuáles son los avances en la construcción del Estado Plurinacional, tomando como una de sus principales aristas; la despatriarcalización.
Observatorio de Derechos de los Pueblos Indígenas de Bolivia (ODPIB).- ¿Cuáles son los avances y retrocesos que percibes en la construcción del Estado Plurinacional?
M.G.- El Estado Plurinacional ahora es un slogan. Los principales aliados del Movimiento Al Socialismo (MAS) son los sectores económicamente más poderosos; uno de ellos es la banca. Eso se lo ve en La Paz directamente, la banca es una de las aliadas principales. Otra de los aliados principales, es seguramente; la agroindustria cruceña, con lo cual, no sé de qué construcción de Estado Plurinacional estamos hablando.
ODPIB.- ¿Qué avances percibes respecto a despatriarcalización en la construcción del Estado Plurinacional?
M.G.- No, a nivel estatal no hay ningún avance. Yo soy la autora de la Tesis de la Despatriarcalización, el Gobierno lo que ha hecho es cooptar esa tesis y generar una Unidad de Despatriarcalización, donde ha puesto como directora a una compañera kallawaya[3]. Me parece muy lindo que una mujer kallawaya esté ahí, pero ella está presente para vestirse de domingo, disfrazarse y hacer de pantalla ¿Cuál es la política de despatriarcalización del Gobierno? Ninguna.
Ha celebrado bodas indígenas al estilo judeo-cristiano, que de indígenas no tenían nada, eran bodas judeo-cristianas celebradas por el “gran inca” que era Evo, no hay despatriarcalización en este sentido.
Estamos viendo ahora, que los pueblos indígenas tienen un problema fundamental en cuanto a las mujeres. Las mujeres migran de las comunidades, jovencitas, changuitas y se van ¿Por qué? porque las expectativas de vida que ellas tienen las comunidades no se las van a colmar. ¿En qué sentido? En el sentido de que el matrimonio es obligatorio, que el lugar de las mujeres es la servidumbre y eso a ellas no les interesa. Entonces, si no se enfrenta este tema, estamos hablando de ficciones, estamos hablando sin ninguna base de nada.
ODPIB.- ¿Qué opinas respecto a la llamada “nueva” participación de mujeres indígenas en espacios políticos?
M.G.- Tienes que ver la generación a la que pertenecen estas mujeres. La cabeza de la organización de mujeres campesinas Bartolina Sisa[4],está conformada por cocaleras de la generación de Evo[5], no por mujeres más jóvenes y que juegan un papel policiaco, persecutorio, de control, respecto de las mujeres más jóvenes.
Por ejemplo: La federación de mujeres campesinas Bartolina Sisa[6] no tiene ninguna capacidad de liderar a los diferentes grupos de mujeres indígenas ni a las diferentes generaciones. Hay muchas contradicciones que ellas las tapan y prácticamente han abandonado su condición de mujeres, para volverse el brazo llunku[7] del MAS.
Uno de los problemas más graves que nosotras rescatamos en la última revista de Mujeres Creando, es el tema del legislador- violador de Sucre[8]. Estamos hablando de un hombre indígena-legislador, que viola a una mujer indígena-trabajadora de la Gobernación. Ahí las bartolinas debían haber tomado una posición fundamental, porque ese era un tema histórico para ellas. Sin embargo, tomaron una posición de socapar al legislador-violador y con eso ellas cortaron su propia cabeza para trabajar como una organización en defensa de las mujeres.
ODPIB.- ¿Crees que la incidencia de ONG’s podría lograr un nuevo cambio en la estructura de los movimientos o colectivos de mujeres?
M.G.- Mira, yo nunca he creído en las ONG’s. Las ONG’s han sido parásitos del movimiento de mujeres, han vivido de estos movimientos. Las ONG’s en Bolivia, las de mujeres, han traído un discurso totalmente liberal, de equidad de género, que no sirve para nada, porque es un discurso que elimina las contradicciones de clase, generacionales, es un discurso conservador, un discurso de inclusión dentro del modelo patriarcal-capitalista de la democracia liberal. Entonces las ONG’s de mujeres no sirven para nada.
Las bartolinas[9] que son un grupo que les interesa acceder a la plata y nada más que a la plata, asimilan ese discurso pero de boca para afuera; de boca para adentro siguen haciendo lo que les da la gana. Entonces, estamos hablando de un fenómeno que tiene dos distorsiones; por un lado tienes a las bartolinas muy machistas, muy fanáticas, policiacas respecto a las mujeres, pero muy hipócritas respecto de las ONG’s liberales que hacen un discurso de equidad de género que no es útil. Pero, las ONG’s son complacientes con las indígenas, porque figuran como beneficiarias y las indígenas son complacientes con las ONG’s porque asimilan parte de ese dinero.
ODPIB.- Entonces, para una re-estructuración del Estado ¿Qué propones con la tesis de la despatriarcalización?
M.G.- Primero, hay que hacerlo desde afuera de las organizaciones sociales. Hoy en día, por lo menos en el espectro que veo desde La Paz, las organizaciones sociales están cooptadas, están con los lazos de discusión ideológica completamente anulados, están incluso muy mafiosas y corruptas. Las ONG’s de mujeres, son ONG’s absolutamente oficialistas, porque su vínculo con el Gobierno les permite acceder a financiamientos. Por lo tanto, el trabajo que hay que hacer debe ser desde las bases, no desde las organizaciones sino desde la calle y desde las mujeres que no tiene ninguna organización. Por otro lado el punto central; hay que decir: basta de la sectorialización del mundo de las mujeres, las campesinas entre campesinas, las lesbianas entre lesbianas, las jóvenes entre jóvenes; es decir, hay que crear instancias organizativas de confluencia de mujeres de diferentes universos.
ODPIB.- ¿Qué nos puedes decir acerca de la “Marcha de las Berthas” organizada por las mujeres indígenas de la IX Marcha junto con las Mujeres Creando?
M.G.- En la Novena Marcha Indígena[10], nosotras decidimos hacer una articulación. El momento en que la marcha se estaba acercando a La Paz, nos interpela, porque nosotras somos un movimiento urbano y porque tenemos una radio, entonces, una comisión de la radio fue a la Marcha Indígena. ¿Para qué? para que hagan despachos diarios desde la movilización, entonces ahí se creó una fusión muy importante con las mujeres integrantes de la marcha, de mucho respeto, no de suplantación de su discurso, conocimos a Nazaret Flores, a Bertha Vejarano, conocimos a muchas mujeres.
Cuando ellas ya estaban en La Paz[11], la forma como el Gobierno Nacional calificó a Bertha Vejarano, al decir es una mula del narcotráfico, es una narcotraficante[12]; nos pareció que como mujeres y como movimiento feminista, nosotras no podíamos quedarnos calladas. O sea, es lo mismo que estoy diciendo del legislador violador, si las bartolinas se callan frente a la violación de una trabajadora indígena, mañana no pueden decir nada. Si nosotras nos callábamos frente al avasallamiento que estaba sufriendo Bertha, cedíamos en nuestra propia lucha. Entonces es ahí que organizamos la “Marcha de las Berthas, todas somos Bertha Vejarano”[13], fue algo muy lindo. Fuimos a pedir permiso a Bertha para usar su nombre y además; su cara y nos dio permiso, no usamos su cara para camuflarnos, y no usamos su cara sin permiso, le sacamos la foto nosotras e hicimos mil máscaras con su cara.
Planteamos que si el Gobierno Nacional no negociaba con Bertha, si ella no era interlocutora valida, ninguna mujer lo era, porque la situación de haber sido mula del narcotráfico, es algo que te delata la situación de extrema pobreza de Bertha Vejarano.
Nosotras organizamos la Marcha de las Berthas porque creemos en la capacidad y necesidad de organizar movimientos entre mujeres de diferentes universos, hacer alianzas urbanas-rurales, entre mujeres en situación de prostitución, con mujeres que no están en situación de prostitución, entre mujeres indígenas con mujeres no indígenas. Nosotras creemos en escenarios de alianza social y la Marcha de las Berthas fue un escenario de alianza social.
Partimos desde la Max Paredes, que en La Paz es como haber salido desde la Terminal Bimodal hacia la plaza principal de Santa Cruz. La gente se iba uniendo, las mujeres entendían perfectamente bien el contenido de esa Marcha. Nuestra iniciativa era llegar hasta el Ministerio de Gobierno, no pretendíamos entrar a la Plaza Murillo, pero sí hicimos varios mítines en las esquinas de la plaza, porque la Plaza Murillo no es propiedad de Evo Morales y no es para que unos indígenas puedan entrar y otros no.
Quienes hicieron los mítines fue la cabeza de la marcha, que eran Nazaret Flores y Bertha Vejarano, ellas fueron quienes tomaron la palabra y ahí se desató una represión brutal, porque el Gobierno Nacional utilizó a la Marcha de las Berthas para desbloquear el campamento de la Marcha que estaba en las puertas de la Vicepresidencia.
De todas maneras, creo que esa marcha permitió volver a reconstruir la solidaridad de la cuidad de La Paz hacia la Marcha, la gente se sintió absolutamente indignada y creo que fue una acción bastante interesante.
ODPIB.- Mencionas que el sector urbano y el sector rural sí tuvieron una alianza estratégica en torno a las acusaciones referidas a Bertha Vejarano ¿Cómo crees que se podría mantener esa unión constante?
M.G.- Nosotras hicimos un par de cosas más, se hizo la Marcha de las Berthas y quisimos plasmar esa alianza en un CD que grabó Nazaret Flores que se llama “Ni la tierra ni las mujeres somos territorios de conquista”, con varias canciones dedicadas a la VIII y IX Marcha y algunas canciones de la propia marcha en ritmo de cumbia, fue un trabajo artísticamente interesante. Puedo asegurar que de parte nuestra estamos intentando mantener el vínculo, pero no es fácil, porque implica recurso que nosotras no tenemos, nosotras tenemos recursos bastante restringidos y también entendemos que las compañeras tienen recursos bastante restringidos. Hay mucho trabajo político por hacer, sea en la ciudad o en el campo, donde están ellas. Básicamente es un vínculo delgadito que ya se ha construido y que se mantiene con personas concretas. Deberíamos hacer encuentros que permitieran fortalecer esa relación, pero no es tan fácil, realmente uno de los límites más fuertes es el tema de los recursos de uno y de otro lado.
Carola Aranibar / Ian Miranda
*Observatorio de Derechos de los Pueblos Indígenas (ODPIB)
[1] Roberto Choque Canqui es Licenciado en Historia, master en Ciencias Sociales con especialidad en ciencias políticas. Autor de diversas publicaciones sobre temas indígenas en Bolivia como: “los líderes indígenas aymaras”; “La educación indigenal en Bolivia”, “La historia de una lucha desigual”, entre otras. Es docente en las carreras de Historia y Antropología de la Universidad Mayor de San Andrés UMSA. Fue docente en la maestría en ciencias sociales de la UMSA y fue docente en Maestrías de la FLACSO Ecuador.
[2] Ensayo publicado por la Vicepresidencia del Estado Plurinacional de Bolivia y la Fundación Boliviana para la Democracia Multipartidaria, en el libro “Descolonización en Bolivia, cuatro ejes para comprender el cambio”
[3] Acerca de la cultura Kallawaya
[4] Haciendo referencia a Confederación Nacional de Mujeres Campesinas Indígenas Originarias de Bolivia “Bartolina Sisa” CNMCIOB “BS
[5] Haciendo referencia al Presidente del Estado Plurinacional de Bolivia; Evo Morales Ayma
[6] Haciendo referencia a Confederación Nacional de Mujeres Campesinas Indígenas Originarias de Bolivia “Bartolina Sisa” CNMCIOB “BS
[7] Llunku en el idioma Quechua hace referencia al adulador; lisonjeador.
[8] Se refiere a la violación ocurrida en el hemiciclo de la Asamblea Departamental de Chuquisaca (Sucre), que tuvo como autor a un asambleísta del partido gobernante MAS y como víctima una señora de la limpieza, quien estaba inconsciente por el estado de ebriedad en el que encontrada. El hecho se conoció puesto que fue captado por cámaras de seguridad.
[9] Haciendo referencia a Confederación Nacional de Mujeres Campesinas Indígenas Originarias de Bolivia “Bartolina Sisa” CNMCIOB “BS
[10] La IX Marcha Indígena partió de la ciudad de Trinidad, Beni, el 27 de abril de 2012 hacia la ciudad de La Paz.
[11] La IX Marcha Indígena llegó a la ciudad de La Paz el 27 de junio de 2012.
[12] Ver nota sobre las acusaciones a Bertha Vejarano
[13] El 5 de julio de 2012, a las 10:00 de la mañana en la ciudad de La Paz, inició la movilización “Marcha de las Berthas, todas somos Bertha Vejarano”, prevista desde la plaza Garita de Lima hasta el Ministerio de Gobierno y convocada por las mujeres de la IX Marcha Indígena en coordinación del colectivo Mujeres Creando, movilizadas ante las denuncias vertidas sobre la dirigenta indígena y presidenta de la IX Marcha Indígena Originaria, Bertha Vejarano, quien fue criminalizada por parte del Gobierno Nacional por llevar píldoras de cocaína en el estómago.Ver nota