A 15 años de su conformación la CPEMB, lanza un pronunciamiento público sobre su posicionamiento en diferentes temas de interés nacional.
Manifiesto de los pueblos indígenas Mojeño Trinitario, Mojeño Ignaciano, Movima, Yuracaré, y Tsimane afiliados a la Central de Pueblos Étnicos Mojeños del Beni CPEMB a 15 años de su constitución.
Las organizaciones indígenas de los pueblos Mojeño Trinitario, Mojeño Ignaciano, Tsimane, Yuracaré y Movima afiliadas a la Central de Pueblos Étnicos Mojeños del Beni (CPEMB), hijos e hijas de Pedro Ignacio Muiba y José Santos Noco, caminantes perpetuos de las sendas milenarias en busca de la Loma Santa y herederos del espíritu del Ichini que inspiró la histórica marcha de 1990 por el Territorio y la Dignidad, desde aquí y con nuestras movilizaciones subsiguientes –de carácter pacífica- interpelamos las bases del Estado monocultural excluyente cuyo efecto modificó las creencias sociales y la cultura política al punto de confluir en la necesidad de refundar un nuevo Estado a través de la Asamblea Constituyente, espacio al que asistimos llevando nuestros sueños y aspiraciones profundas que se constituyeron en los fundamentos del proyecto pluralista y comunitario que la constitución de 2009 recoge, por ello reaccionamos contundentemente ante el desvío del proceso de cambio y la violación de nuestros derechos, lideramos la octava y novena marcha indígena en defensa del TIPNIS porque no se trata de la defensa de un territorio sino de la vida frente al viejo proyecto civilizatorio que ha sentenciado nuestra desaparición como pueblo, por ello a pesar de las presiones, la violación de nuestros derechos, la persecución e intromisión política sobre nuestras estructuras orgánicas nacionales y regionales, hemos logrado mantener nuestra independencia y a quince años de habernos conformado como regional, expresamos a la opinión pública nacional e internacional lo siguiente:
- Con el sacrificio de hombres y mujeres y a fuerza de movilizaciones hemos logrado el reconocimiento y titulación de nuestros territorios indígenas; sin embargo, hoy estamos sufriendo un sistemático avasallamiento por los agentes del capitalismo que con el impulso de las políticas públicas están desplegando una estrategia geopolítica de control espacial con asentamientos humanos (interculturales) contiguos a nuestros territorios y recursos naturales en lugares en los que se prevén posibles megaproyectos extractivos y de infraestructura.
- El año 1991, fruto de los acuerdos de la marcha de 1990, se promulgó el D.S. 22611 en el que se establece que las ex concesiones forestales de Bosque de Chimanes una vez caducadas, debían pasar a formar parte de los territorios de los pueblos indígenas Mojeño, Tsimane, Yuracaré y Movima; sin embargo, sin tomar en cuenta las preferencias legales que fijan la dotación a pueblos indígenas como prioridad, se ha declarado tierra fiscal y se están impulsando asentamientos de interculturales.
- Los pueblos indígenas del TIPNIS y la CPEMB jamás nos hemos opuesto a la vinculación caminera, siempre que estos proyectos respeten nuestros derechos. Hemos marchado el año 2011 y 2012 porque lo que está en peligro no es sólo el TIPNIS, sino la defensa de la vida frente al viejo proyecto civilizatorio que plantea un tipo de desarrollo basado en el saqueo y la destrucción de la naturaleza, cuyo resultado será el enriquecimiento de unos pocos que, articulados a los intereses corporativos de las multinacionales, intentan arrebatarnos nuestro territorio que es la única posibilidad de existencia. Esta lucha nos atañe a todas y todos los bolivianos, pues el bosque del TIPNIS que se pretende atravesar con la carretera y la consiguiente ampliación de la frontera cocalera, cumple una función ambiental que regula las pampas benianas y los flujos de agua de Cochabamba.
- El año 2002 los pueblos Mojeños constituimos la CPEMB y fuimos la primera organización en Beni en respaldar abiertamente el proceso de cambio a riesgo de amenazas y agresiones de los sectores reaccionarios y conservadores que paradójicamente hoy se encuentran representando al partido de gobierno. Ahora, a través del amedrentamiento y el chantaje con la aprobación de proyectos, los operadores del gobierno en total irrespeto a nuestras estructuras organizativas buscan debilitarnos, dividirnos, cooptarnos con embates de permanente injerencia e intromisión en nuestros asuntos internos.
- Consideramos que la Constitución Política es la más importante conquista, no solo de los pueblos indígenas sino de toda la sociedad boliviana. Se trata de una de las normas constitucionales más avanzadas en materia de DDHH; sin embargo, en los últimos años con mucha preocupación observamos el permanente resquebrajamiento de la institucionalidad democrática. Por ello, hacemos un llamado a todas las fuerzas sociales a que asumamos una defensa intransigente frente a nefastos intentos de violación de la democracia como el recurso abstracto que busca la re-postulación de los candidatos del oficialismo.
Bajo las consideraciones precedentes, los pueblos indígenas afiliados a la CPEMB, a 15 años de nuestra constitución, ratificamos la defensa de nuestros derechos, nuestros territorios y la vida, en la búsqueda de consolidar el Estado plurinacional comunitario, un Estado que nos incluya, que respete nuestros derechos, nuestros territorios, nuestras formas de organización, de participación y representación política, de administración de justicia y de otros ámbitos de la vida de nuestros pueblos.
Por la unidad de los pueblos indígenas y de todos y todas las bolivianas.
Trinidad, 18 de octubre de 2017